Todo estudiante de colegio sabe que subir arriba y bajar abajo son redundancias del lenguaje. Tras tantas décadas de tener esa idea en la cabeza, la Real Academia Española contestó esta pregunta, que parece tener una respuesta muy obvia.
Los verbos «subir» y «bajar» se construyen con un complemento de lugar o de dirección. Que el sentido del movimiento (arriba/abajo) esté implícito en esos verbos, no implica que no pueda explicitarse en el enunciado.
Es decir, para la RAE es posible y correcto expresar que alguien subirá arriba. Sin embargo, esto no obsta que siga siendo una redundancia, que forma parte de los vicios del lenguaje y que, consiste en la repetición o uso exagerado de una palabra, expresión o concepto, así como la reiteración de información incluida en textos o mensajes.
Algunos ejemplos de redundancia son: entrar adentro, salir afuera, pero sin embargo, más sin embargo, regalo gratis, repetir otra vez, mi opinión personal, cita previa, accidente fortuito, entre varios otros.
Otro vicio del lenguaje muy similar es el denominado pleonasmo, que consiste en el uso de uno o varios términos innecesarios, para darle un sentido completo a la oración. Conocer por primera vez, llenar por completo, mi amigo personal, periodo de tiempo, puño cerrado, estrenar por primera vez son unos pocos ejemplos.