La menor de la parcialidad Mby’a Guaraní tiene un embarazo de 10 semanas y está internada en un centro asistencial en Caazapá. El Ministerio Público dio apertura a una investigación por tratarse de un caso de abuso sexual infantil. Para los familiares de la pequeña, la situación forma parte de su cultura y no existe un delito.
El fiscal Carlos Mercado comentó que habló con el cacique de la comunidad y con la mamá de la niña, pero para ellos el hecho está completamente normalizado bajo la creencia de que la menor “ikuñataĩma”, debido a que ya presentó la menstruación.
Aparentemente, la niña de 10 años era obligada a mantener relaciones con un hombre de la misma parcialidad y de quien no se tiene muchos datos porque los familiares se negaron a brindar. La Fiscalía trabaja con la Dirección de Derechos Étnicos para determinar los pasos a seguir e investigar el caso.
“Solicitamos a la psicóloga del Ministerio Público para que se constituya hasta el hospital a fin de dar una contención y tratar de tener más datos. Estamos muy pendientes de lo que nos diga la oficina de Derechos Étnicos” expresó el fiscal Carlos Mercado en conversación con la radio 1330 AM.
Mercado explicó que si bien en la legislación penal paraguaya se trata de un caso de abuso sexual, el derecho consuetudinario que rige en las comunidades indígenas, obliga a analizar profundamente si constituye o no un delito.
La pequeña de 10 años se encuentra internada en un centro asistencial de Caazapá, mientras se investiga el caso.