Panorama Fronterizo

Los insultos y quejas por parte de pasajeros son su “pan de cada día”. Todos ellos están expuestos como pocos a la delincuencia. Muchos -incluso- llevan las secuelas marcadas en el cuerpo. Pero siempre están allí, no se detienen, y te llevan a destino como si nada de eso pasara. Algunos, pese a todo lo que viven día a día, marcan la diferencia con un gesto que grafica que no todo está perdido en nuestro país.

Como es el caso de Pablo, un chofer de la línea 18., a quien -sin que se dé cuenta- le tomaron una foto para contar el noble gesto que tuvo. El conductor subió a una estudiante que estaba en medio del raudal y evitó que se mojase completamente. «El se llama Pablo, no sé el apellido ni nada mas, excepto que maneja un colectivo de la linea 18. Hoy me tocó salir cuando más llovía, justo frente a la UNA una chica miraba el raudal y definitivamente le iba a ser imposible cruzar.Cuándo Pablo le hace señas y dice ‘subí, te voy a acercar lo más que pueda al otro lado», comenzó contando Raquel Villate, en sus redes sociales.

«No sé si será el estrógeno, situaciones que estoy transitando o estoy tan fogueada de tanta mala onda, falsedad, egoísmo, o simplemente hemos caído en lo más miserable, que hasta una buena acción nos sorprende. Cuando veía como trataba Pablo de acercarle lo más posible y ya con las lágrimas pensé ¡LPM tan mal no estamos viejo!Hoy, este muchacho, que con la sonrisa más sincera que vi en mucho tiempo me miró y dijo ‘pobrecita iba a mojar todo ko su zapato’. ‘Sos capo si que’, le dije. Le saqué la foto y al bajar le pregunté el nombre, ojala llegue hasta él este relato», contó la joven. «Ojalá Pablo la vida te devuelva mil veces más lo que estoy segura haces cada día y es darnos una lección de humanidad y empatia», finalizó.

La historia fuer compartida muchísimo y acaparó las redes sociales.

#CRONICAPY

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